¿Cómo hacer que un perro no ladre?

¿Tienes un perro que no para de ladrar y no sabes qué hacer? Te damos algunos consejos para que tu perro no ladre compulsivamente y puedas disfrutar, sin ruidos, de tu mascota. Si te has preguntado cómo hacer que un perro no ladre compulsivamente estás en el sitio correcto: en Soy Manitas te damos algunas claves para evitar este molesto comportamiento de tu mascota. Lo más importante es detectar el motivo o la causa de los ladridos compulsivos para poder poner una solución. Hay que tener en cuenta que hay diferentes tipos de ladridos o situaciones en las que el animal ladra: hay ladridos porque el animal pasa mucho tiempo solo, hay perros que ladran compulsivamente cuando se quedan solos, esto se debe a la ansiedad por separación. En otras ocasiones se trata de un ladrido territorial, para marcar y defender el espacio que considera propio. Otras veces el ladrido es una simple invitación al juego. Conocer por qué ladra el perro te ayudará a evitar esta conducta. 1-Si el ladrido se debe a la soledad, lo único que tu perro necesita es mayor atención. Más cuidado y más  cariño por parte de los miembros de la familia será una buena clave. Puede que el animal ya haya cogido el hábito de ladrar para llamar la atención. En este caso será necesario mostrarse autoritario y firme: hacer un ruido fuerte a la vez que se le da la órden de callar puede ser un buen método para que el can asocie el ruido con la necesidad de parar de ladrar. Es importante recordar que esta correción de conducta sólo debe hacerse cuando el perro está ladrando, hacerlo después o a destiempo sólo provocará confusión en el animal. 2- Es muy frecuente que los perros ladren compulsivamente cuando se quedan solos, esto se debe a la ansiedad que les produce la separación. La mejor forma de evitar que un perro ladre al quedarse sólo es acostumbrarlo poco a poco. Al principo hay que tratar de dejar solo al perro durante poco tiempo y un buen ejercicio puede ser salir de casa, cerrar la puerta y en cuanto empiece a ladrar, entrar y ordenar que se calle. Repitiendo esto varias veces conseguimos que el animal asocie el ladrido con la "reprimenda". Otro comportamiento frecuente en algunos canes, es ladrar a sus dueños cuando se dirigen hacia la puerta para salir, en estos casos es recomendable modificar ese comportamiento situándose entre el animal y la puerta (que es el objeto que le obsesiona), y con firmeza y serenidad mandar callar al perro. 3- Otras veces el ladrido se debe a la territorialidad. Cuando el perro ladra para defender su espacio puede llevar a conductas agresivas contra gente de fuera, vecinos, etc. Una buena forma es que el animal se acostumbre a la presencia de gente ajena a la unidad familiar en el domicilio, así aprende a ceder terreno y aceptar la presencia de otros. Corregir esos ladridos cuando comienzan con un enérgico "no" es muy positivo, al igual que recompensar al animal cuando obedece la órden. 4- Ladrar es la forma de comunicarse que tiene el perro. ¿Qué hacer cuando un perro ladra mucho porque quiere jugar? Es importante tener en cuenta que el perro necesita liberar energía y, por tanto, es necesario, también, un tiempo de juego. Pero si no es el momento o tu perro es incansable, es necesario corregir esa conducta: con un "no" firme y autoritario será suficiente en la mayoría de los casos. Además, es muy frecuente que el animal no insista cuando ve que su "invitación" al juego es declinada. Fuente: Soymanitas