19 de agosto de 2011

Dale una ocupación.


Puede ser que, para algunas personas, el tipo de vida actual, tan llena de presiones, inseguridades, preocupaciones, etc. hagan que se sientan ansiosas, cansadas, y para muchos, quizá el mejor momento del día es, poder llegar a casa y “desconectarse del mundo real” y convivir con su perro;  o tal vez, no tienen esa presión diaria pero quieren tanto a su perro que mucho de lo que ellos hacen, gira en torno a su mascota
Le recomiendo  porque en las consultas, frecuentemente se presentan problemas de comportamiento de los perros, originadas por la falta de manejo de los propietarios. Por supuesto que existen los casos en que la persona ha hecho las cosas correctamente y aún así el perro manifiesta conductas que requieren atención pero, hoy me gustaría exponerle la posibilidad  de que el “comportamiento alterado” de su ejemplar esté causado por la forma en que se desarrollan sus días en casa…

dingoUn perro, si viviera de manera silvestre, sabe que  diariamente debe preocuparse por conseguir alimento y agua, por mantener o ampliar su territorio, debe estar preparado para defenderse de algún posible ataque; quizá encuentre la posibilidad de reproducirse, en fin, diariamente tiene muchas actividades, para decirlo de manera concreta: tiene trabajo.

Veamos ahora, el caso del perro que vive en nuestras casas: En cuanto lo llevamos a vivir con nosotros, de manera automática, está dado el espacio, el territorio donde va a vivir; ya no tiene que lograr ser admitido en un grupo; el alimento se le proporciona de manera regular, sino es el caso en que ni siquiera debe esperar un horario, porque el alimento esta de forma constante y permanente a su libre alcance; este perro cuenta además con buena dotación  de juguetes, botanitas, premios, paseos, caricias y, en muchos casos, de manera totalmente gratuita.

Me parece perfecto, a fin de cuentas, no decidimos tener un perro en casa para maltratarlo ni mucho menos; obviamente queremos lo mejor para él, pero es conveniente entender lo que él necesita para estar bien y es que además de contar con alimento, un techo seguro, cariño, etc. él necesita trabajar.
Y, si nosotros ya resolvimos todo lo que son sus necesidades “básicas” pues sería muy bueno que le diéramos la oportunidad de ocupar su mente, su energía, sus capacidades de manera constructiva. A fin de cuentas, optamos por tener a nuestro lado a un ser vivo, inteligente, capaz de recordar, de aprender y de utilizar lo aprendido en el mejor momento.

dingoNo es de extrañar que muchos de los tratamientos que se dan para modificar conductas no deseadas o problemas de comportamiento incluyan proporcionarle al perro trabajo de obediencia, asistir a clases de adiestramiento y ejercitarlo de manera regular.

El adiestrarlo tiene varios beneficios directos, el primero sería que aprende a obedecer a su dueño, a verlo con respeto, a reconocer la autoridad de su amo y eso, le proporciona un equilibrio muy importante. Otro beneficio es que lo mantenemos con su atención centrada en algo positivo;  está aprendiendo cosas nuevas, las realiza correctamente y recibe una gratificación directa de quien tiene la autoridad ante sus ojos.

Cuando nuestro perro se concentra en lo que se le está enseñando, están trabajando su inteligencia funcional, su memoria a largo plazo, su atención, su energía física, etc. Al final de una sesión de obediencia podemos verlo cansado pero satisfecho. Lo mismo diría para sesiones de fresbee, agility, etc.

dingoPensemos un instante por ejemplo, en personas con problemas de  depresión, ansiedad, insomnio, etc. ¿Qué les sugiere su médico? ¡Ejercítese! ¡Busque una actividad que le interese! Seguramente ha escuchado de las terapias ocupacionales ¿verdad? Bueno, la idea es que las personas con alguna alteración, encuentren algo en que mantener ocupada su mente, puedan relajarse, sacar esa energía que no encuentra salida, distraerse.

Pues algo similar ocurre en la mente de algunos de nuestros perros, están aburridos, con poca actividad física, sin nada nuevo que aprender, con pocos o ningún estímulo que le provoque ponerse a trabajar.

Se puede contar con una gran cantidad de actividades para que nuestro amigo se sienta ocupado, útil, activo. Un perro que tiene la mente trabajando tendrá menor riesgo de presentar problemas de conducta.
Pensemos que podemos hacer para darle un “trabajo constructivo” a nuestro perro, si le parece bien, aquí le doy unas cuantas ideas, sólo para empezar, después, todo lo demás, corre por su cuenta:

dingo♦ Proporcionarle sesiones de obediencia.
♦ Ejercitarlo en actividades como trotar, fresbee, agility, rastreo, pastoreo, etc.
♦ Si ya sabe los comandos de obediencia con voz, enseñarle ahora con señas.
♦ Cuando ya se sepa los comandos con voz y seña, mezclarlos durante la misma sesión.
♦ Cambiar frecuentemente la ruta, horario y duración de sus paseos.
♦ Enseñarle a buscar su juguete favorito.
♦ Pedirle que realice un comando de obediencia antes de recibir su plato de comida, bocadito o juguete.
♦ Jugar con él a que usted se esconde en una habitación y él deberá buscarlo.
♦ Cuando lo deje solo, proporciónele juguetes a los que se les puedan meter trozos de galletita o comida semisólida, para que se entretenga sacándolos.
♦ Ponga a su perro junto a usted y coloque en el suelo dos recipientes (ejem. 2 tazas o vasos de plástico que no sean transparentes; haga que él vea como usted coloca debajo de uno de los vasos un trozo de galleta y dele la orden para que busque en cuál de los dos está.
♦ Ponga un juguete del perro en un lugar donde él pueda verlo pero que no tenga acceso fácilmente; deberá ingeniárselas para obtenerlo. Por supuesto, será colocado de tal manera que no pueda hacerse daño al momento de buscarlo.
♦ Dentro de su rutina, por ejemplo de fresbee, puede meter comandos de obediencia para que él ejercite la orden y obtenga que se le lance el disco.
En fin, me imagino que con base en el conocimiento que tendrá usted de su perro y sus preferencias, podrán crear muchas más actividades para que él disfrute sabiendo que, diariamente, va a trabajar en algo muy positivo y divertido.
Fuente perros de mexico y experiencia profesional.